Para poder conectarnos con nuestros antepasados y entender los problemas y dificultades que las personas de provincia tienen, es necesario llegar a ellos mediante el idioma. Renata Flores lo hace con su música, ella y sus padres son unos de las más de 441.928 personas que hablan el quechua, la lengua indígena originaria del país. Ella ha buscado la manera de que su música pueda llegar a los jóvenes con un ritmo novedoso y contagioso como lo es el pop y el trap.
“Decidí cantar en este idioma porque sentía que se estaba perdiendo y que muchos chicos de mi edad ya no lo hablaban. Dije voy a cantar en quechua, pero tenía que ser en un género que llegue a los más jóvenes, que ellos lo puedan escuchar y cantar. Creo que por eso me metí al género pop, trap, urbano y fue arriesgado porque no sabía cómo iban a reaccionar las personas; porque valgan verdades este es un género que es mal visto, pues es sexista. Para mí el quechua está ahí, pero como un símbolo de protesta”, comenta Renata con una sonrisa muy inocente.
Ella es ayacuchana y con solo 18 años ya pasó por varios concursos de televisión cuando apenas era solo una niña. Su gusto por el canto viene de su mamá, pues era vocalista de la banda ‘Patty y los caletas’, por ella fue que aprendió, se inspiró y se adentró en el mundo de la música. También por la banda de hard rock en quechua llamada ‘Uchpa’, ellos son los precursores de la fusión del rock con nuestro idioma y que se formó en 1993. “Uchpa me llamó la atención porque era un estilo que me gustaba. En Ayacucho canté junto a ellos, tuvimos un concierto y conocí a todo su grupo, fue el año pasado. ¡Chevere la experiencia porque ellos me inspiraron!”, cuenta.
La letra de sus canciones son un grito de cambio. Hace un mes lanzó su último videoclip ‘Qam hina’ que significa como tú y que inspira a las niñas que no tienen las mismas oportunidades. En la descripción del video detalla: “Mi abuelita no pudo concluir sus estudios en la escuela; pues era muy complicado llegar a ella. Los peligros que los niños tienen que sufrir en tan larga caminata, en especial las niñas, muchas de ellas dejan de estudiar a causa de ello. Los pueblos en las zonas rurales han sufrido mucho y lo seguirán haciendo si es que no pensamos en ellos como nuestra gente, nuestra sangre; ellos son merecedores de más atención, ya bastante tiempo han estado en el olvido, sólo los recordamos en el friaje y en realidad merecen más que un abrigo como yo, como tú = “qam hina”.
A los 13 años tuvo que viajar a Lima desde Ayacucho y quedarse en la capital por un año. Su voz se escuchó en “La voz Kids”, ahí conoció a Kalimba, Eva Ayllón y Ana Karina, de quienes aprendió mucho. A Renata le encantaban las canciones y voz de Kalimba, por eso lo eligió como coach. Él le enseñó a mejorar en la técnica vocal y de todo lo que necesita saber un artista cuando esta sobre el escenario. Recuerda con nostalgia que solo se quedó en las batallas, pero que igual iba a seguir adelante, en ese momento su mamá fue su motor y solo un “no te sientas triste a seguir nomás” bastó para continuar.
A raíz de su salida del programa decidió no quedarse con los brazos cruzados y buscar más alternativas: Youtube fue la herramienta más cercana. El primer cover en quechua que hizo fue el de “House of the rising sun” del grupo The Animals y después le siguió el de Michael Jackson “The way you make me feel”, video que está cerca de tener 2 millones de reproducciones.
Gracias a sus covers y sus letras en quechua, Renata llamó la atención de los medios tanto nacionales como internacionales. “Fue bien loco. Vinieron a Ayacucho varios medios a entrevistarnos, también recibimos llamadas de la BBC, CNN, etc. Desde ahí sentí que tenía una responsabilidad grande con el quechua”. A partir de ese éxito Renata trata de dar un mensaje, transmitir y de inspirar a todos para que sepan que nuestro idioma es muy importante.
Renata decidió aprender quechua por sí misma y le pidió en repetidas ocasiones a su abuela que le enseñara. Sus papas tuvieron un poco de temor porque su hija sea discriminada. Ella comenta que el miedo siempre ha estado ahí, pero aprender del idioma es importante, ya que es de mucho respeto hacia otras personas, “aprendes la cosmovisión andina, y todo lo que nos hayan transmitido nuestros antepasados”, señala.
En todos los conciertos de Renata se la ve dominar el quechua, pero dice que todavía no es tan profesional y que aún está en proceso de aprendizaje. Ahora está estudiando producción musical donde le están enseñando programas para producir su propia música y así el próximo año pueda sacar su propio álbum. Una de las cantantes femeninas que la inspiran en este momento es Rosalía, ya que ella fusionó el flamenco con el género urbano, como ella lo hace con el quechua y el trap.
La joven cantante en sus canciones abarca la fuerza que tiene la mujer hoy en día, es así que con esa misma filosofía se unió a la campaña de Sedal “Repensemos el rosado, juntas”. Ella y Mayra Goñi cantan acerca de que todas mujeres debemos brillar y cumplir nuestros sueños. Renata explica: “Muchas personas están hablando del empoderamiento de la mujer y también varias marcas, como Sedal. No solo hablemos del rosado como un color débil, sino osado y mostrarnos así. El tema de ‘Tijeras’ habla de que no debemos quedarnos calladas, empoderarnos y que somos muy valientes ante toda la injusticia que hay, por ejemplo en el tema de los feminicidios”.
“Con mi música quiero se den cuenta que nuestra cultura es rica y que deberían sentirse orgullosos de eso y no avergonzarse. Por mis redes sociales trato de enseñar el quechua y recordarles a mis seguidores que no hay límites para poder soñar y crear. Todas podemos ser lo que queremos ser y dejar los estereotipos atrás y hacer lo que nos nace”, finaliza.