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¿Cuántas veces hemos soñado con tener la vida de “los ricos y famosos”? Vivir sin preocupaciones monetarias, viajar por el mundo, tener una casa grande, etc. Pero si te detienes y te pones a pensar en todo lo que tienes ahora, te darás cuenta que eres más afortunada de lo que crees y les darás más valor.
La rutina y las preocupaciones hacen que algunas cosas pasen desapercibidas, que no nos demos cuenta de que estamos mejor de lo que pensamos y que somos mucho más fuertes que el día anterior.
Entonces la próxima vez que estés de malas, date un respiro y piensa en todas estas cosas con mucho valor para ti que muestran que estás mejor de lo que crees.
1. Te levantas todos los días para ir al trabajo
Pese a lo mucho que odias despertarte temprano para ir a la oficina, recuerda que tienes un lugar donde puedes desarrollarte profesionalmente y ganarte el sustento de cada día. Agradece que tienes esa seguridad y aprovéchala, pues no sabes hasta cuándo puede durarte.
(Foto: Shutterstock)
2. Tienes un lugar donde llegar todas las noches
Después de un largo día, lo único que quieres es llegar a tu casa y descansar. ¿Eres consciente que hay personas cuyo hogar no es tan acogedor como el tuyo o simplemente no tienen uno? Puedes decir que tiene un espacio que te perteneces, íntimo y solo tuyo.
3. Pudiste pagar las cuentas este mes
Reniegas con la cola en el banco o con que tu sueldo se te va en pagar deudas. Pero lo hiciste y lo pudiste resolver sin hacerte demasiadas preguntas ni preocupaciones. Además, hacerlo te hace ser más consciente de lo importante que es ahorrar para el futuro y no gastar tanto.
4. Puedes permitirte no hacer nada
Mientras tú estás ese domingo en casa, viendo televisión y haciendo prácticamente nada, hay otros que no pueden darse ese lujo. Tal vez, podrías sacrificar un día de esos al mes y hacer algo por los demás como ir a un programa de voluntariado o compartir con personas que más lo necesitan.
(Foto: Shutterstock)
5. Hay personas que te quieren
Podrás pelearte, pensar que los odias, gritar y enojarte con tu familia y amigos, pero en el fondo sabes que sin ellos tu vida no sería igual. Ellos están siempre para ti y debes sentirte afortunada de tener tantas personas que se preocupan, te valoran y quieren lo mejor para ti.
6. Las cosas que aprendiste
Si miras hacia atrás, no eres la misma mujer que hace un año. Te pasaron cosas, aprendiste de ellas y te hiciste una mejor persona. Tal vez fueron dolorosas, te costó superarlas o dejaron una cicatriz en el corazón, pero lo importante es que saliste adelante y hoy son parte de un pasado que te hace más fuerte.
7. No vives “con las justas”
Puedes pensar que no te alcanza lo que ganas estar de malas a fin de mes. Pero, ¿recuerdas la película que fuiste a ver al cine? ¿la noche que saliste con tus amigas a tomar un trago? ¿ese nuevo vestido que te encanta? Tienes suerte de poder darte un gusto de vez en cuando sin tener que sacrificar algo indispensable en tu vida.