Muchas veces, la experiencia de ser padres le llega antes a tus hermanos que a ti misma. Y los sobrinos suelen convertirse rápidamente en los engreídos de la familia. Estos son algunos aspectos fabulosos que representan el hecho de tenerlos a tu lado.
1. Todo es diversión
Uno de los aspectos más maravillosos de convertirse en tía es que todo es diversión. No tienes ninguna carga correspondiente a la maternidad, las cuales pueden llegar a ser un trabajo muy duro. Por el contrario, disfrutas de los sobrinos y sobrinas y ellos lo hacen igualmente.
2. Volver a vivir la niñez
Jugar con los hijos e hijas de tus hermanos te dará la oportunidad de actuar como una niña otra vez. Puedes llevarlos a pasear, caminar en el parque, montar bicicleta, saltar en un trampolín, lo que desees. Incluso, podrás leerles las historias que te gustaban a ti de pequeña. Volver a la infancia no solo es divertido, sino saludable ya que te relajará.
3. Tiempo de práctica
Si deseas tener tus propios hijos algún día, ser tía es una gran práctica. Igualmente, si no estás tan segura de querer convertirte en madre, los sobrinos podrían darte una idea de lo que significa tener un compromiso como madre.
4. Enseñar con tu experiencia
Brindar consejos y algunas vivencias propias tuyas a tus sobrinos siempre será alentador para ti. Tenerlos cerca y compartir tus anécdotas, buenas o malas, es una excelente manera de mirar con optimismo tu vida misma.