Ejercitarse no tiene por qué convertirse en algo rutinario. Hoy puedes encontrar todo tipo de rutinas de entrenamiento pensadas para cada tipo de persona: las bailarinas, las que quieren algo relajante, las tradicionales o las que buscan algo mucho más duro.
El CrossFit es una buena alternativa para estas últimas, ya que se trata de un entrenamiento que trabaja casi todo el cuerpo de manera constante e intensa. Cada sesión de una hora es distinta a la anterior, lo cual lo convierte en un ejercicio entretenido donde descubrirás que tu cuerpo es capaz de hacer cosas que nunca imaginaste.
Si te sientes preparada para aceptar el reto y probar un entrenamiento distinto, el CrossFit puede ser una gran opción. No solo es una cuestión de físico sino también de mente como lo demuestran estos beneficios:
1. Te sentirás poderosa
No hay nada mejor que esa sensación después de un entrenamiento intenso donde te hicieron sudar la gota gorda. Ese sentimiento de poder, de haber “sobrevivido” y cumplido con el reto, de sentir el dolor al día siguiente sabiendo que está ahí porque has trabajado de verdad. Todo eso es lo que te hará volver al día siguiente.
2. Haces nuevos amigos
Todas esas personas tan tonificadas que van al CrossFit en algún momento fueron novatos y conocen esa sensación de sentirse perdido. Es por eso que ahora son los que más animan a sus compañeros y eso crea un vínculo especial entre las personas que practican este tipo de entrenamiento. Y es que no hay nada mejor que “sufrir” en grupo.
3. Te ayuda a concentrarte
El CrossFit no es solo una actividad física sino que necesita de concentración: para aprender la técnica de un ejercicio, para hacerlo de la manera correcta y no lesionarse, para ser conscientes del trabajo que realiza nuestro cuerpo, etc. Entrenar concentrada hace que viertas todas tus energías en esa actividad y libera tu mente de otras preocupaciones durante una hora.
4. Es motivador
Después de cada sesión, tus resultados son apuntados en una pizarra para que puedas ver tu progreso. Puede parecer frustrante notar lo avanzadas que están las personas que entrenan contigo pero todo depende del cristal con el que lo miras. Esos números son una motivación a seguir entrenado más fuerte para alcanzar tus metas.
5. Te hace enfrentar tus miedos
¿Imaginas llegar a entrenar y descubrir que ese día toca pararte de manos o subir hasta el techo usando una cuerda? Puede sonar aterrador y jurarás nunca más volver a hacerlo pero eso es lo bueno del CrossFit: te hace salir de tu zona de confort y aceptar nuevos retos.