Andrea Castillo C.
Ardor, lagrimeo constante y, sobre todo, la sensación de tener arenilla o un cuerpo extraño en los ojos son los síntomas del síndrome de ojo seco, uno de los problemas más frecuentes de la consulta oftalmológica.
La afección, aunque no altera la agudeza visual de quien la padece, sí puede resultar muy molesta, sobre todo en casos severos.
¿Qué origina esta alteración? La doctora Elizabeth Yagui, de Oftalmosalud, nos explica que el 80% de casos de ojo seco es producto de la rápida evaporación de las lágrimas y esto sucede cuando hay alteraciones en las glándulas de Meibomio. Estas glándulas se encuentran distribuidas en los párpados y producen una secreción lipídica. Gracias a unos diminutos orificios ubicados a lo largo de la base de las pestañas, esa secreción impide la rápida evaporación de las lágrimas y de la capa protectora que estas forman sobre la superficie ocular.
El síndrome de ojo seco es mucho más frecuente en las mujeres, que pueden presentar esta afección durante el embarazo o la menopausia por causa de los cambios hormonales.
Pero más allá del factor hormonal, las mujeres tienen más riesgo de desarrollar este síndrome oftalmológico, porque usan maquillaje y diferentes tipos de cremas faciales, que al entrar en contacto con los ojos, afectan la superficie ocular, según nos precisa el director del Instituto Oftalmológico Wong, doctor Carlos Wong Cam.
Entre los más jóvenes, asegura el especialista, el síndrome de ojo seco es consecuencia del uso excesivo de las pantallas de computadoras sin que medien descansos visuales oportunos.
Ten presente que una vez diagnosticado, el síndrome de ojo seco no tiene cura pero sí tratamiento para aliviar los síntomas, como el uso de lágrimas artificiales con o sin preservantes (el médico te prescribirá productos hasta encontrar el más indicado para tu caso particular).
Otra alternativa que puedes evaluar con tu médico es el uso de tampones lagrimales. También hay un tratamiento con láser (se usa para activar el funcionamiento de las glándulas lagrimales), pero antes es preciso tener un buen diagnóstico del problema. Este tratamiento requiere de cuatro a cinco sesiones para mejorar las molestias (costo estimado S/.1.000 por sesión).
Los más jóvenes pueden prevenir el ojo seco con algunas medidas básicas como mantener la pantalla de la PC a unos 40 o 50 cm de distancia y dejar de mirarla cada dos horas (se sugiere mirar a otro lado durante unos diez minutos y parpadear 20 o 30 veces por minuto). También ten mucho cuidado con los medicamentos que afectan la calidad de la lágrima, como los antihistamínicos, ciertos analgésicos y otras medicinas para la presión arterial y las enfermedades cardíacas. Recuerda que todo en exceso es dañino.
Causas. Entre estas se cuentan los cambios hormonales en las mujeres mayores de 40 años, el embarazo; el uso de pantallas de computadoras personales; vivir en lugares de clima seco y con viento; el humo del tabaco y el aire acondicionado.
Fármacos. Ciertos medicamentos aumentan el riesgo de ojo seco: los antihistamínicos para alergias, los calmantes para el dolor, las pastillas que ayudan a dormir y las que alivian la ansiedad, fármacos para el corazón y la presión arterial.
Enfermedades. El 20% de casos de síndrome de ojo seco son secuela de enfermedades autoinmunes, como síndrome de Sjögren, artritis reumatoide, lupus, rosácea y otras afecciones relacionadas con la tiroides.