Durante las últimas semanas se han vivido noches con temperaturas muy bajas en las ciudades del litoral peruano. Los días con neblina han alertado a la población, quienes ya sacaron del armario sus prendas más abrigadoras, pero muchas veces no es suficiente.
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El Servicio Nacional de Meteorología e Hidrología (Senahmi) ha pronosticado que el invierno de este año será más frío de lo habitual, con mayor incidencia en la sierra central y el sur; sin embargo, Lima también experimentará temperaturas incluso por debajo de los 9 °C, no registradas desde el inicio de este siglo.
Tomar precauciones desde ahora será de suma importancia para evitar contraer alguna enfermedad respiratoria. Por esa razón, el doctor Jordan Gutiérrez, de Mapfre, comparte cinco recomendaciones que te ayudarán a protegerte de las afecciones más comunes de la temporada, no solo causadas por el frío:
Abrigarse lo suficiente:
Lo recomendable es vestir entre dos a tres capas de prendas para mantener el calor corporal y evitar sentir frío. Eso sí, asegura los mecanismos de transpiración adecuados, y siempre que no represente sobreexponerte, no te abrigues demasiado para que tu organismo regule tu temperatura corporal con la del ambiente y evites cambios súbitos de temperatura sacándote y poniéndote prendas.
Alimentación e hidratación adecuadas:
Consume frutas, verduras, granos enteros y grasas saludables, que tengan predominantemente vitaminas D, C, Hierro, y Zinc, para reforzar el sistema inmunológico. Los pescados, los cítricos, los huevos y el yogurt son una buena opción en esta temporada para evitar los resfríos. Mantente hidratado consumiendo abundantes líquidos tibios.
Cuidarse la piel:
Aunque durante el invierno las horas de sol sean escasas en comparación con otras épocas del año, no hay que olvidar aplicar protector solar en el rostro y utilizar un bálsamo para hidratar los labios. De ese modo, se evitará que la radicación o la humedad, el frío y las bajas temperaturas maltraten la piel provocando envejecimiento prematuro.
Monitorear los estados de ánimo:
La ausencia de luz solar durante las estaciones de otoño e invierno tiende a provocar la aparición del trastorno afectivo estacional, un tipo de depresión que provoca tristeza, poca energía, aumento de peso y en un caso extremo hasta pensamientos de suicidio. Si al cambio de estación, se empieza experimentar cambios repentinos en el estado de ánimo, lo más recomendable será acudir a un psicólogo.
Realizar deporte:
Con el frío la temperatura corporal baja. Practicar ejercicios diariamente ayuda a que las células del cuerpo consuman más energía para transformarlas en calor. Además, es una buena época para mantenerse en forma a comparación del verano porque se suda menos y eso ayuda a mantenerse mejor hidratados. Eso sí, lleva ropa de cambio cuando practiques deporte para evitar permanecer con ropa húmeda.