El concepto detrás de zapatos trujillanos que usó Emma Watson

Entonces Patrick decidió fundar Nisolo con el afán de dar trabajo a estos zapateros y garantizar su bienestar, mientras que se encargaba de tener un producto de buena calidad en el mercado. Un ejemplo de moda ética donde las prendas son fabricadas respetando los derechos sociales de los trabajadores, el medio ambiente y a precio justo.

Para Patrick y Zoe, su socia, el corazón de Nisolo no se basa solo en los zapatos que ofrecen sino en sus trabajadores. “A ellos les damos acceso al mercado internacional, sueldo sobre el promedio, entrenamiento y condiciones de trabajo seguras. ¿El resultado? Empleo constante, mejores condiciones de vida, acceso a la educación, poder de ahorro y, sobretodo, dignidad y empoderamiento”, dicen en su página web.

La fábrica de Nisolo está en el distrito de El Porvenir en Trujillo, donde trabajan unas 90 personas entre zapateros y personal administrativo. En su tienda de Nashville (Tennessee) se ofrece calzado para mujeres y hombres entre sandalias, botas y mocasines con precios que van desde los 98 hasta los 240 dólares.

Además de ayudar a salir adelante a peruanos, Nisolo también cuenta con una línea de joyería elaborada por artesanos de Kenia. Para ellos, igual que para nuestros compatriotas, es una oportunidad para salir adelante y mejorar su calidad de vida.