Se dice que a partir de los 50 años es más difícil perder peso para las mujeres, pues a esa edad el cuerpo comienza a disminuir la producción de hormonas, lo que se acentúa con la llegada de la menopausia. Asimismo, la composición de grasa en su cuerpo es distinta a la del hombre, lo cual influye en la ganancia de peso.
Entonces, es importante que las mujeres comiencen a cuidar su salud a partir de los 30 años, inicio de la etapa adulta, con una buena alimentación balanceada y actividad física. Cabe mencionar que es importante mantener un estilo de vida saludable y ajustarlo de acuerdo a sus necesidades. Así como evitar seguir dietas estrictas que prometen “cambios espectaculares”.
La doctora Ali Santana, directora del Centro Médico Vital explica que uno de los cambios más comunes es el aumento de grasa en las caderas y la elevación de los niveles de colesterol en sangre. Esto se debe principalmente a la disminución de la masa muscular, el aumento del porcentaje de grasa, del peso, flacidez por la pérdida y disminución en la producción del colágeno.
¿Existe un método ideal para perder peso después de los 50 años?
El método que la doctora Santana propone para perder los kilos de más consiste en realizar las regulaciones metabólicas y hormonales necesarias, para luego poder iniciar con un plan de alimentación que permita la pérdida de peso acompañado del ejercicio físico.
Para ello, debemos identificar qué tipo de deporte o ejercicio es el indicado para nuestro cuerpo y con el cual nos sentimos más cómodas. Debes tomar en cuenta que se necesitan al menos tres meses para construir el hábito de la alimentación y ejercicio, así podremos lograr resultados duraderos.
La doctora resalta que el objetivo de la pérdida de peso no debe ser cumplir con ciertos estándares de belleza, sino “alcanzar la mejor versión de mí, que me agrade, me haga sentir bien y sobre todo me permita estar saludable”.
¿Qué es lo que debo tomar en cuenta?
- Evita llevar una vida sedentaria. Mover el cuerpo es necesario para quemar calorías y mantener la masa muscular.
- Limita el consumo de alimentos dañinos. Por ejemplo, ricos en azúcar y fructosa procesada, grasas trans y saturadas en exceso, ingesta elevada de comidas rápidas, tortas, postres, dulces.
- Controla el exceso de trabajo y el estrés.
- Duerme las horas adecuadas para el correcto descanso y la producción de hormonas.
- Busca ayuda profesional integral para el manejo adecuado en esta etapa de la vida.
Es importante potenciar el consumo de proteínas para evitar perder músculo, además, no caer en el error de intentar reducir nuestros platos principales a ensaladas y verduras.
¿Cómo mantener los resultados?
La disciplina, constancia y correcta orientación con respecto a la actividad física, nutrición y tratamiento en caso sea necesario, son la clave para mantener los resultados. Muchas personas creen que para mantener un peso debe estar bajo una dieta estricta; sin embargo, no existe una dieta mágica que nos haga perder peso.