De acuerdo con Avlin Imaeda, PhD especializada en salud metabólica y pérdida de peso, no todos son conscientes de la influencia que tiene la salud intestinal en el resto del organismo. Por ello, la Escuela de Medicina de Yale, junto a la profesora Imaeda, compartió algunas recomendaciones para mejorar nuestra digestión y absorción de alimentos.
Avlin Imaeda resalta que, gracias a estos tres consejos, podrán observar notorios cambios en su salud. Asimismo, indicó que los efectos positivos también se verán reflejados en el sistema inmunológico, la efectividad de la función cerebral y en el control del peso corporal.
Consumir la comida en su forma más natural
La especialista señala que consumir alimentos integrales, como frutas y verduras, será de gran ayuda para cultivar un microbioma saludable. Es decir, una comunidad de microorganismos, incluyendo las bacterias y virus que viven en nuestro organismo, que nos ayudará a evitar enfermedades. En ese sentido, recalcó que los alimentos procesados pueden afectar negativamente la sensibilidad a la insulina, además de aumentar el riesgo de desarrollar diabetes tipo 2.
Por ejemplo, la experta menciona que, si deseas beber un smoothie o un jugo, es mejor ingerir la fruta en su forma natural. “Esto se debe a que, al licuar la fruta, se puede generar un aumento de los niveles de azúcar, puesto que el líquido se digiere más rápido”, agregó. Asimismo, como el líquido avanza con mayor rapidez, aumenta el hambre con más frecuencia.
Del mismo modo, Imaeda aconseja evitar los preservativos o los endulzantes no nutritivos, pues pueden influenciar de manera negativa en la salud.
Realizar tres horas de ejercicio semanales como mínimo
Imaeda afirma que el ejercicio conduce a un microbioma más diverso y saludable. De la misma manera, aumenta el butirato, un ácido graso de cadena corta producido por bacterias a partir de la fibra que se ingiere en la dieta pero que no se puede descomponer sin bacterias. “El butirato es uno de los combustibles clave que las células necesitan para crecer, dividirse y mantenerse saludables”, estableció.
En adición a eso, la especialista en digestión mencionó que los niveles elevados de butirato ayudan a reducir la inflamación, prevenir y disminuir la gravedad de la enfermedad inflamatoria intestinal, acortar el riesgo de cáncer de colon y la salud inmunológica en general.
La profesora añadió que el ejercicio debe durar, mínimo, tres horas y las sesiones deben ser distribuidas a lo largo de la semana.
Dormir de 7 a 8 horas por noche y establecer un horario de sueño regular
Avlin Imaeda recalca que el sueño tiene un efecto significativo en las condiciones psiquiátricas, la inflamación sistémica, el aprendizaje, la fertilidad, el peso y otros aspectos de la salud.
“Una nueva investigación demuestra que algunas bacterias intestinales, tanto como las proteínas que producen, tienen un ciclo basado en los ritmos circadianos que involucran el comportamiento de dormir y comer”, aseveró la profesora de la Universidad de Yale. De ese modo, concluyó que los factores mencionados pueden afectar algunos procesos como el metabolismo de los lípidos y, al menos en ratones, la capacidad de responder a las infecciones.
Por ende, es fundamental establecer un horario regular de sueño y respetarlo diariamente.