En el año 2005, se publicó un artículo llamado Review of General Psychology, en donde resaltaban la forma en la que las personas solían ver la felicidad. El estudio reveló que el 50% de la felicidad de las personas está determinada por sus genes, el 10% depende de sus circunstancias y el 40% de la “actividad intencional” (principalmente, si eres optimista o no). Entonces, está claro que la felicidad depende también de nuestra voluntad, pero para profundizar más en el tema, Bienestar del Diario El Comercio conversó con Juan Pablo Velásquez, lifecoach y autor del libro ‘El tipo del espejo’.
“Nos cuesta tanto ser felices, porque tenemos un concepto erróneo de la felicidad. La sociedad nos ha hecho creer que la felicidad como tal se encuentra afuera, se encuentra en las cosas y para ello debemos entender algo muy crucial, que se encuentra en uno mismo”, explica Velásquez.
Diferencias entre la felicidad y la alegría
Para entender qué es la felicidad, primero que todo debemos desarmar lo que nos han vendido sobre ella. Juan Pablo comenta que la felicidad no es lo mismo que la alegría o que estar contento.
- Alegría: Es la reacción instintiva que tenemos como humanos al recibir estímulos externos, los cuales catalogamos como positivos. Es un brazo de la felicidad, pero no lo es todo.
- Felicidad: Es un estado del ser al cual deberíamos apuntar de presencia y plenitud. Ser feliz requiere un ejercicio contante de presencia, ser feliz va mucho más allá de los contextos, puedes ser feliz estando en situaciones complicadas; como también puedes estar triste estando en situaciones alegres.
“¿Nunca te ha sucedido que consigues algo que pensaste que te haría muy feliz y cuando lo consigues no te sientes alegre?”, se cuestiona Velásquez.
Ser felices depende de nosotros mismos
El ser humano es un ser sociable y tener personas a nuestro alrededor que nos quieren, nos hace sentir bien. Pero el especialista menciona que la idea de que nuestra felicidad debe depender de los otros o que ellos tienen que hacer acciones para que me sienta más feliz, es un error.
“Al hacer esto, no estamos siendo responsables de nuestra vida y no estamos siendo protagonistas de ella, sino que, le estamos dando el poder a los demás de controlar nuestra vida. Es por ello que, invito siempre a las personas a responsabilizarse primero de ellos, de tener una buena autopercepción y por ende, de su estado del ser”, agrega.
2 recomendaciones a tener en cuenta para ser felices
Velásquez asegura que no depende un 100% de que la felicidad sea de nuestra voluntad, pero si un 90%, ya que ser felices requiere un gran trabajo constante de presencia, de conciencia, de armonía, de amor propio, de autodisciplina.
- No debemos pensar que ser felices se basa en ser positivos al extremo, porque caeremos en la positividad tóxica y debemos ser realistas, pero desde esa realidad aprender a aceptar los hechos.
- Ser grato: La gratitud ante lo que nos rodea, ante lo que somos, nos lleva al presente. Es un superpoder que nos trae la aquí y al ahora, y nos permite ver con riqueza todos los acontecimientos sean buenos o malos.
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