Cuando hablamos de validación emocional hacemos referencia a la forma de comunicar la aceptación hacia los demás -o hacia nosotros mismos-; sin embargo, eso no significa que estemos de acuerdo o que compartamos los pensamientos de la otra persona. Validar es aceptar y dar por válido aquello que otra persona está sintiendo tanto si estamos de acuerdo o no con su punto de vista o sus sentimientos.
En pocas palabras, es la empatía y aceptación hacia otro individuo. La validación emocional ayuda a mejorar nuestras relaciones interpersonales, ya que la otra persona se siente comprendida, reconocida, y favorece el aumento de la verbalización de lo que el otro piensa y siente, pues éste se siente escuchado. Esto provoca un incremento de la confianza entre los dos y establece la base para crear una buena relación.
Estos consejos te ayudarán a mejorar la validación emocional:
- Estar presente. Existen muchas maneras de estar presente, aunque muchas veces es difícil hacerlo. El primer paso para la validación emocional es la conciencia plena, una estrategia para conseguirlo es coger de la mano a la persona que nos habla y atender a lo que dice, o emplear la escucha activa. El mindfulness también puede ser útil para aprender a estar en el momento presente.
- Escuchar y reflexionar. La reflexión objetiva se refiere a realizar un resumen objetivo de lo que la otra persona te ha dicho. Para hacerlo, debes tomar en cuenta que es necesaria la escucha activa (prestar atención a sus reacciones y emociones), la reflexión te permite aprender y entender de manera más profunda al ver las situaciones desde diferentes lentes. También, es necesario tener conocimiento sobre inteligencia emocional, ya que puede ayudarte a entender, etiquetar y regular las emociones.
- Entender la reacción de los demás. En ocasiones, nos dejamos llevar por la intensidad de las emociones y no nos paramos a pensar en la reacción de otras personas. Es fundamental entender lo que el otro puede estar sintiendo o pensando. Para hacerlo, puedes intentar averiguar qué ha llevado a la otra persona a actuar de esa manera, comienza realizando preguntas de forma cuidadosa y hazle saber que entiendes cómo se siente y que estás dispuesto a escucharlo hablar de ello.
- Normalizar las emociones. Entender las reacciones emocionales como algo normal ayuda a todo el mundo. Para una persona emocionalmente sensible saber que la mayoría de las personas se pueden sentir igual en la misma situación es beneficioso. La aceptación hacia la experiencia emocional del otro va a ser positiva para cualquier relación interpersonal. Es importante hacer lugar a todas las emociones, ya que todas tienen un sentido.