En la actualidad, según la Organización Mundial de la Salud (OMS), las enfermedades alérgicas afectan a un 33% de la población, siendo la rinitis alérgica la más común. Se estima que esta cifra aumente al 50% en el 2050, de acuerdo a la Organzación Mundial de la Alergia, potenciada por los efectos del cambio climático, el aumento de la polución ambiental e incluso los estilos de vida que las personas han adoptado luego de la pandemia. Muchas personas saben que son alérgicas, pero no reconocen a qué exactamente, por ello es importante realizarse exámenes que ayudan a identificarlas.
En relación al Día Mundial de la Alergia, Bienestar conversó con la Dra. Silvia Uriarte, Médico alergóloga de Auna Clínica Delgado para que nos expliquecuáles son y en qué consisten los exámenes para detectar alergias.
“La alergia es una reacción exagerada del organismo a un alérgeno, que en condiciones normales se tolera sin desarrollar síntomas al exponerse a éste. Los síntomas se pueden dar a nivel de nariz, ojos, bronquios y piel cada vez que me exponga al alérgeno”, explica la experta.
¿Cómo puedo saber si soy alérgico/a?
Según la Dra. Uriarte, la forma más sencilla de reconocer cuando alguien es alérgico es por los síntomas:
- Un estornudo tras otro.
- Mocos nasales.
- Congestión nasal.
- Picazón en la nariz u ojos.
- Tos seca.
- Silbidos en el pecho, al despertar o al acostarse.
Factores que causan la alergia
- Los ácaros de polvo: Una alergia que suele mejorar a lo largo del día y se reanuda al exponerse al polvo. Se encuentran predominantemente dentro de colchones, almohadas, frazadas, cojines, peluches, pelo de animales, y se alimentan de la caspa humana como de mascotas con pelo.
- A los animales del hogar: Gato, perro u otro animal que producen los síntomas ya mencionados.
- Pólenes: Esto durante la etapa de polinización.
- Ambientes húmedos: Hongos de humedad.
- Alimentos o fármacos: En nuestro entorno lo más frecuente son los mariscos, específicamente los langostinos pudiendo tolerar el resto de mariscos en la mayoría de casos. Esto se da porque tenemos una alta prevalencia de sensibilización a ácaros del polvo, los cuales tienen alta reactividad cruzada a nivel de sus alérgenos con mariscos, y una gran homología con los alérgenos de los crustáceos (langostinos, cangrejos, camarones, langosta). En población infantil la leche de vaca y huevo son los alérgenos más predominantes.
- Aines (Anti Inflamatorios No Esteroideos): Son el grupo farmacológico que mayor cantidad de reacciones alérgicas se tienen reportadas en la actualidad, seguidos por las penicilinas, así como contrastes radiológicos.
- Níquel, fragancias, preservantes o conservantes: Son los alérgenos de contacto responsables de la mayoría de casos de dermatitis de contacto alérgica.
“Si es que hay alguna molestia ante esto, el paciente deberá evitarlo hasta realizar un estudio alergológico y corroborar la tolerancia a dicho alérgeno”, expresa.
4 exámenes que se realizan para determinar si soy alérgico/a
Existen muchas pruebas de alergia, la experta menciona que dependerá de los síntomas y el mecanismo inmunológico que sospeche el alergólogo, para determinar qué prueba es la más conveniente.
- Inmunoglobulina E (Ig E) específica (respuesta humoral): Esto se realiza en pacientes que tienen síntomas respiratorios como rinitis y asma, síntomas oculares, así como alergia a alimentos, para ello está indicado realizar las pruebas cutáneas (prick test) o la cuantificación en sangre de Ig E específica.
- Prick test: Consiste en aplicar gotas de diferentes extractos alergénicos en la cara volar del antebrazo, con ayuda de una lanceta se aplica una punción en cada una de las gotas, y en los siguientes 15 a 20 minutos se visualizará los resultados en la misma consulta. La prueba no es dolorosa ni saca sangre, y de ser positiva se podrá sentir una ligera picazón en la zona donde se aplicó el alérgeno al que se ha tenido dicha respuesta, y sólo tiene como requisito no haber tomado antihistamícos días previos a la realización de la prueba.
- Provocación oral: Esto se utiliza en los pacientes que sean alérgicos a los alimentos y, anteriormente, se hayan realizado una prueba cutánea negativa a dichos alimentos, al igual que el estudio de alergia a fármacos, pero no se ha detectado nada. La provocación oral consiste en administrar dosis progresivamente creciente del alimento o fármaco sospechoso, durante unas horas y luego estar en observación médica por si se da alguna reacción adversa.
- Realización de pruebas epicutánea o test de parche: Este se utiliza para la dermatitis de contacto alérgica, se da por un mecanismo diferente a los antes mencionados, conocido como hipersensibilidad tipo 4 (respuesta celular). Consiste en colocar en la espalda diferentes baterías de alérgenos de contacto, y demanda que el paciente a lo largo de 4 días, no presenta sudoración que se podría dar con el ejercicio físico ni presencia de agua en la espalda.
Tratamiento de las alergias
Finalmente la experta nos menciona las formas de tratamiento de algunas alergias:
Alergias respiratorias: Las que se manifiestan con estornudos, mocos, congestión nasal, picazón ocular, tos, etc,
- Se tratan con inmunoterapia alérgeno específica, conocida como vacunas de alergia (tratamiento inmunológico), las cuales se aplican a lo largo de 3 a 5 años.
- Los fármacos como antihistamínicos, sprays nasales (corticoides), inhaladores (salbutamol o corticoides) sólo controlan los síntomas respiratorios mientras se usan.
- Asimismo, se debe tratar de cumplir con las medidas de evitación a la exposición al alérgeno.
Alergias de alimentos o fármacos: La manera de tratarlo es mediante la evitación estricta de dicho alimento o fármaco
“En niños con alergia a leche de vaca o huevo, existe una alta posibilidad, de hasta un 90%, de cura completa con el paso de los años a lo largo de su infancia. De no ser resuelta la alergia a leche de vaca o huevo, se puede plantear realizar una desensibilización a estos, la cual también puede ser realizada a fármacos en determinadas circunstancias, ya que este procedimiento ofrece una tolerancia inmunológica temporal, mientras se mantenga la toma diaria del alimento o fármaco. Si se suprime la toma del alimento o fármaco, se pierde dicha tolerancia inmunológica, y tras una nueva exposición se dará una nueva reacción alérgica al alimento o fármaco”, finaliza la experta.
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