SHEILA ALVARADO
Ella es ganadora del Premio Nacional de Literatura en la categoría infantil además de artista plástica.
SHEILA ALVARADO Ella es ganadora del Premio Nacional de Literatura en la categoría infantil además de artista plástica.
/ ROLLY REYNA
Carlos Oré Arroyo

Nuevos rostros empiezan a consolidarse en el panorama literario de nuestro país y sucede gracias a la presencia del Premio Nacional de Literatura. Este año le tocó a la artista plástica, ilustradora, activista y escritora Sheila Alvarado quien en julio del año pasado publicó junto a la editorial SM un corto pero fascinante cuento que narra dos historias paralelas cargadas de imaginación.

¿De dónde nacen todas estas figuras que has utilizado en la historia?

En los últimos años me he acercado a hacer pequeñas investigaciones y una de estas fue sobre las sirenas, así que es ese personaje era uno que ya me rondaba. En realidad, todo el cuento parte de una canción que compuse hace varios años. Fue durante una época en la que estuve muy mal, no podía dibujar así que me puse a componer. Una de estas canciones es la que finalmente le da vida al cuento.

¿Existe la intención de musicalizarla?

Era parte de un disco que iba a producir el curador de arte tradicional y no tradicional César Ramos, él estuvo localizando los músicos y buscando todo lo que hacía falta pero lamentablemente falleció así que el proyecto se dejó ahí por el momento. Yo seguí con mis investigaciones y empecé a escribir más.

Es decir que hasta el momento no existe ningún tipo de conversación para retomar el proyecto.

En estos momentos no. Yo me dejo llevar mucho por el instinto de las cosas, por un lado suceden eventos que llevan a otros y en mi caso me llevó a hacer una investigación profunda de lo que me llamaba la atención y que me ha llevado al tema que estoy trabajando para mi último libro. Actualmente estoy trabajando en un abecedario de la biodiversidad en el Perú que lo estoy haciendo gracias a un fondo del Ministerio de Cultura. Ese trabajo llevó a que “Un cuento, una canción” tenga muchas menciones de plantas y alimentos a lo largo de la historia.

Comentabas al inicio que te habías dedicado a investigar sobre sirenas ¿A qué fuentes recurre uno para ese tipo de trabajos?

Yo llego a los personajes a partir de mis vivencias, todo lo relacionado al canto se encuentra muy relacionado a mi padre porque cantamos juntos toda la vida y desde pequeña he viajado mucho cambiando de sierra a selva en varias ocasiones. Mi acercamiento al tema no es algo que haya planeado sino que simplemente se dio y lo mismo sucedió con el cuento, luego de oír las primeras voces empecé a escribir y no paré.

¿En qué momentos dices que es momento de sentarte a escribir esta historia?

Tenía muchas ganas de mandar un cuento a un concurso y llevaba trabajando en una historia unos cinco años y no lograba terminarla cuando de pronto apareció esta idea mientras andaba envuelta en el tema de las sirenas. Luego de escuchar las primeras dos líneas en mi cabeza me senté dos días completos a escribirlo mientras pensaba en las imágenes que la acompañarían. La historia nace principalmente de la canción pero nunca pensé que terminaría convertida en un cuento.

Tu además de haber escrito la historia, hiciste las ilustraciones que la acompañan.

Así es. Algunos pueden pensar que por ser la ilustradora de mi historia puede resultar fácil, pero es mucho más complicado porque debo editar dos cosas a la vez y tratar de que una soporte a la otra y no pierda su nexo, además de procurar que las imágenes hablen entre líneas, que aporten algo más de lo que está en el texto sino simplemente será una repetición. Creo que el trabajo más grande fue cuando tuve que realizar la última edición del texto junto a las imágenes que me tomó alrededor de tres a cuatro meses.

Son pocos los casos de literatura infantil en la que encontramos el cruce de idiomas (quechua-español) como en este caso ¿Por qué utilizar ese estilo?

Yo creo que es una cosa muy natural dado que Lima es la ciudad con más quechua-hablantes que hay, utilizamos muchas palabras y muchos productos de la sierra y no nos damos cuenta de lo tan conectados que nos encontramos con ellos. Para mí fue muy importante llevar, en los últimos años, cursos que quechua porque entendí que la lengua es cultura y podía entender mejor muchas cosas que había oído desde hace muchísimo tiempo. El quechua es súper poético.

25 DE NOVIEMBRE DE 2019

SHEILA ALVARADO
Ella es ganadora del Premio Nacional de Literatura en la categoría infantil además de artista plástica.
25 DE NOVIEMBRE DE 2019 SHEILA ALVARADO Ella es ganadora del Premio Nacional de Literatura en la categoría infantil además de artista plástica.
/ ROLLY REYNA

Varios repiten esta idea que acabas de mencionar ¿Qué lo vuelve poético?

Por ejemplo no existe adiós en el quechua, la palabra que se usa para la despedida se traduce a "Hasta que nos volvamos a encontrar". Hay cosas muy específicas que también he utilizado en la historia como en la parte en que un personaje dice que es amiga de la noche y de la soledad porque cuando en quechua uno se refiere a un amigo tiene que ser ligado a una acción.

Existe una parte en la que se menciona que el personaje carga consigo una canción que luego es trabajado a lo largo de la historia de una forma muy poética también.

Así es, es la única canción que el personaje tiene. Yo hablo mucho entre líneas en el cuento pero hablo realmente de una niña que puede haber sido una huérfana de los ochenta y que lleva mucha tristeza consigo, por eso hay imágenes en las que trabajo con la oscuridad. La canción que compuse es un huayno, entonces tiene su componente de tristeza que se va transformando en alegría.

¿Qué otros mensajes entre líneas hay en tu historia?

Hay muchos arcoíris dado que soy de la comunidad LGTB y me gusta poner eso porque transmite una parte de mi identidad en el libro. Están los alimentos que he procurado que tengan una participación mayor y el trabajo con el tema de las sirenas.

Otra característica es que la gran mayoría de personajes son mujeres.

Sí y son mujeres fuertes que deciden acompañarse, no son mujeres que necesitan de compañía. Niñachay va por el mundo aprendiendo, la misma sirena pesca, caza y disfruta mucho de su soledad pero decide acompañarse y compartir. Escuchamos mucho que las mujeres no pueden estar solas, pero es totalmente falso.

Teniendo un público infantil, ¿qué emociones pretendes generarles?

Creo que lo que más quería generar era empatía aun a la distancia, incluyendo esa distancia que existe en los alimentos que comemos, la educación que recibimos y demás. Quería compartir la idea de cuidar la naturaleza, en el primer borrador no estaba muy presente el tema pero procuré empujarlo un poco más a medida que iba corrigiendo y para eso me serví de un par de personajes motivados por la codicia.

El premio que has recibido une la categoría infantil y juvenil en una sola ¿Crees que para la siguiente entrega habría que ser separado?

Es un poco ambiguo porque los niños de ahora no eran los de antes y creo que hay historias que pueden leerlos personas de todas las edades. Creo que podría servir que se premien libros para niños aún más pequeños.

¿Qué expectativas te genera haber recibido este premio?

Ha hecho que mire un poco hacia atrás y reconocer que este premio es de mi familia. Yo fui una niña disléxica a quien sus padres ayudaron bastante, ellos nunca se rindieron aun cuando me costaba tanto sobrevivir a la educación que uno recibe. El premio me ha hecho pensar en la necesidad de fomentar más la presencia de libros ilustrado, capaces de generar ideas y que inviten a los profesores a descubrir con los más pequeños. Yo tuve la suerte de que mi padres no se rindieran conmigo y espero que suceda lo mismo con todos aquellos que necesitan mucha ayuda.

Contenido sugerido

Contenido GEC