Cuando una tiene ganas de hacer ejercicios, no existen las excusas. Puede que estés muy ocupada durante el día y en las noches solo quieras llegar a casa a descansar o a compartir tu tiempo con tu familia.
Si es así, entonces puedes entrenar por las mañanas antes de empezar con todos tus pendientes. Levántate una hora o media hora antes todos los días y realiza estos ejercicios en compañía o sola.