Una alimentación saludable es uno de los hábitos de autocuidado recomedados por la OMS para prevenir enfermedades, como las cardiovasculares.
Una alimentación saludable es uno de los hábitos de autocuidado recomedados por la OMS para prevenir enfermedades, como las cardiovasculares.
Redacción EC

Actualmente, las son la principal causa de defunción en el mundo y, según estimaciones de la , se cobran 17,9 millones de vidas cada año. Sin duda, estas afecciones están conformadas por un grupo de trastornos del y los vasos sanguíneos que incluyen coronarias, enfermedades cerebrovasculares y cardiopatías reumáticas. Básicamente, el representa el 16% del total de defunciones a nivel global.

¿Qué es un ataque cardíaco?

Muchos de los ataques cardíacos o infartos de miocardio son causados por una obstrucción total de un vaso sanguíneo del corazón denominado, arteria coronaria, lo cual impide que llegue la sangre rica en oxígeno y nutrientes al músculo cardíaco, lo que podría ocasionar una muerte súbita, si no se realiza una intervención médica inmediata, explica

El infarto del miocardio representa el 16% del total de defunciones a nivel global, según la Organización Mundial de la Salud (OMS)
El infarto del miocardio representa el 16% del total de defunciones a nivel global, según la Organización Mundial de la Salud (OMS)

¿Cuáles son los factores de riesgo que dañan el corazón?

Existen dos tipos de factores de riesgo, como señala Rodrigo León, cardiólogo de la Clínica Ricardo Palma, por un lado, los inmodificables, es decir, los relacionados al género, edad y carga genética y por el otro, los modificables, los cuales son hábitos que, si no se abordan a tiempo pueden traer consigo consecuencias irreversibles.

Factores de riesgo modificables
Una dieta poco saludable
El tabaquismo
El sedentarismo
El estrés
El dormir pocas horas

¿Cuáles son los alimentos que nos ayudan a prevenir ataques cardíacos?

Menestras

Las menestras son aliadas de la salud cardiovascular, ya que si se incorporan en la alimentación podrían reducir un 14% del riesgo de sufrir un infarto o angina de pecho, según un estudio de la . Asimismo, las lentejas, garbanzos, frejoles, entre otros, ayudan a reducir significativamente los niveles de colesterol LDL, por ende, disminuye la probabilidad de una afección cardíaca.

Chocolate

Sin duda, este debe contener un mínimo de 80% de cacao, el cual es un alimento muy bueno para el corazón y las arterias. Su alto contenido en flavonoides y ácido oleico, además de su propiedad antioxidante, ayudan a combatir el envejecimiento, activa la circulación y previene los trastornos cardíacos, indicaron en el diario Clarín.

Frutas y verduras

Definitivamente, estos alimentos de origen natural, son indispensables para lograr una alimentación saludable, ya que le brindan agua al cuerpo, vitaminas, minerales, fibra y antioxidantes, los cuales son la clave para el cuidado del corazón. Como comparten en el portal web Semana, las fresas, los arándanos, el brócoli o la papaya, son solo algunos productos que pueden ayudarnos a evitar infartos.

Una alimentación balanceada y variada basada en: frutas, verduras, frutos secos, menestras, aceite de oliva, cacao, entre otros, puede ayudarnos a prevenir infartos cardíacos.
Una alimentación balanceada y variada basada en: frutas, verduras, frutos secos, menestras, aceite de oliva, cacao, entre otros, puede ayudarnos a prevenir infartos cardíacos.

Nueces

Los frutos secos son esenciales para lograr una dieta balanceada; sin embargo, las nueces encabezan las listas de los mejores alimentos para el corazón. Esto se debe a su alta composición en ácidos grasos Omega-3, lo que permite un mejor control de la presión arterial y ayuda a la prevención de enfermedades cardiovasculares, informan en el medio argentino.

Aceite de oliva

Un estudio publicado en la revista , realizado por el departamento de nutrición de la Harvard TH Chan School of Public Health, encontraron una reducción relativa de los infartos de un 18%, puesto que esta aporta antioxidantes, polifenoles, vitaminas y otros compuestos bioactivos que son ideales para disminuir el riesgo cardiovascular. Igualmente, eleva los niveles de colesterol HDL (bueno) y disminuye el colesterol LDL-c (malo), provorcionando un mejor control de la hipertensión arterial.

Ante cualquier malestar que podamos presentar, es fundamental acudir al médico para que nos pueden realizar una evaluación. Además, si deseamos un régimen nutricional más personalizado, lo recomendable es contar con una asesoría especializada.

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